viernes, 21 de enero de 2011



Hay veces, en ocasiones, en las que alguien se cruza en tu camino y te das la vuelta para mirarlo. Ni siquiera sabes porqué. Tal vez sea su olor, su forma de andar, de mirar o algún detalle que sólo tú has sido capaz de ver. Entonces, te detienes y observas como se marcha. Piensas quién será esa persona, cómo será. Si le gustará el café o preferirá el té. Si irá con prisa o volverá de haber estado con alguien. Te preguntas que hubiera pasado si hubieses cruzado una palabra con él. Y sonríes, pero sigues andando. Yo tuve una de esas ocasiones, sólo que no me detuve, en vez de eso te seguí. Con todo lo que ello implica.

5 comentarios:

  1. Bonita estructura de blog. Muy agradable.

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  2. Y que pasó?
    Muchas veces me ha pasado, eso...pero nunca lo seguí...

    Un beso :)

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  3. Pues ya hay que ser valiente para hacer eso, ¡eh! :)

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  4. Eso qe publicaste es muuy cierto :)
    hay personas qe tiene un ALGO muy especial'

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