Viento ligero de ese que es absurdo pero no te deja respirar, de ese que no llega nunca por casualidad, que es bonito aunque esté desafinado, que no responde a ninguna ecuación ni fórmula, que no te suelta. Y basta con no detenerte demasiado, con no pensar demasiado.
qué genial qué genial
ResponderEliminarPf, no pensar es demasiado difícil...
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